Vacunación para la recría de pollos en los barrios populares del Cusco

Durante el pasado mes de septiembre, en el marco del proyecto financiado por el Ayuntamiento de Córdoba, se inició el proceso de capacitación a la población de las asociaciones pro vivienda Qosqo Intikawarina e Inti Raymi, de Santiago de Cusco, para la prevención de enfermedades en la recría de pollos BB mediante el uso de vacunas.

En el proceso de crianza de pollos, la vacunación es una operación necesaria, sumamente importante y delicada para controlar y prevenir las enfermedades más comunes como la bronquitis viral infecciosa, el gumboro y newcastle, entre otras, y se aplica 3 veces: al nacer, a la primera y la segunda semana de vida.

Si bien la vacuna no sustituye ninguna labor en el manejo de la crianza de pollos BB, constituye una buena práctica de esta. Los pollitos llegaron de Lima con la primera vacuna, y para la colocación de la segunda vacuna se capacitó a un grupo de 8 mujeres y 2 hombres de los barrios vulnerables de Qosqo Intikawarina e Inti Raymi del distrito de Santiago, ubicados en las zonas más altas de las laderas que rodean la ciudad de Cusco.

La población capacitada aprendió a preparar la vacuna triaviar y las medidas de higiene necesarias para manipular correctamente a los pollitos. De esta manera, el equipo técnico del Centro Guaman Poma enseñaron sobre la forma correcta de sujeción del pollito para no estresarlo, el uso de guantes de látex y la aplicación de la vacuna de manera delicada y precisa sin descuidar la cadena de frío de la vacuna (entre 3 y 6 ºC)

La jornada de vacunación motivó mucho a las y los criadores en proceso de capacitación, quienes con mucho entusiasmo continúan sus turnos cada 6 horas para atender su crianza, hasta que a los 21 días puedan iniciar su proceso de comercialización.

Los galpones para la cría de aves forman parte de las estrategias para enfrentar la crisis alimentaria y económica, para mitigar el hambre, generar ingresos y facilitar el acceso a carne para mejorar la dieta alimentaria. Además, permite transferir tecnología, en especial a las mujeres de los Comités del Vaso de Leche, para que puedan dedicarse a esta actividad económica y mejoren su autonomía y empoderamiento socioeconómico.