La ejecución de este proyecto ha permitido establecer mecanismos técnicos para que niñas, niños y jóvenes indígenas en edad escolar de 10 escuelas rurales del Municipio de Tomina ejerzan su derecho a una alimentación adecuada y suficiente en un contexto de crisis climática y sanitaria. En definitiva, se ha organizado, planificado e implementado acciones que nos permite afirmar que los 1058 estudiantes de estas unidades educativas están ejerciendo su derecho a una alimentación complementaria diversificada y elaborada con criterios nutricionales. También se ha desarrollado la asistencia técnica a padres y madres de familia, profesorado y estudiantes en huertos escolares sobre operación y mantenimiento de los sistemas instalados, manejo de las hortalizas, buenas prácticas agrícolas y otros. Respecto a las capacitaciones en Educación Alimentaria Nutricional fueron desarrolladas en talleres con el apoyo de un profesional especialista, junto al personal de la Unidad de Nutrición del Municipio.

Entre los logros importantes de este proyecto, destacamos:

• La producción hortícola en macrotuneles y con riego tecnificado, lo que implica el consumo de forma continuada de hortalizas por estudiantes de las unidades educativas.
• La mejora y construcción de cocinas y mesones en las unidades educativas, que permite el manipuleo de alimentos de forma adecuada e higiénica, además de disminuir la presión sobre el bosque.
• El desarrollo y fortalecimiento de los conocimientos y capacidades de los actores locales en el manejo de huertos y la preparación de alimentos en el nivel comunal, lo que permite contribuir a la sostenibilidad de las obras apoyadas con el proyecto.
• La consolidación del Comité de Gestión y Coordinación de la Alimentación Complementaria Escolar, con reglamento de funcionamiento y un plan de trabajo consensuado y ejecutado participativamente.
• La mejora cualitativa de la alimentación de niñas y niños de las escuelas está favoreciendo el rendimiento académico según la percepción del sistema educativo.
• La gestión coordinada y compartida de la Alimentación Complementaria Escolar entre la sociedad civil y el estado, lo que implica el involucramiento efectivo de la comunidad educativa para identificar los problemas y buscar soluciones que fortalezcan la ACE impartida en el territorio.

Entre los compromisos establecidos al cierre del proyecto para garantizar su sostenibilidad: el Comité realizará seguimiento y monitoreo trimestral del funcionamiento de huertos, sistemas de riego, cocinas mejoradas y otros: el Sistema de Salud continuará con capacitaciones y la campaña de desparasitación a la población estudiantil, y la Dirección de Desarrollo Productivo del Gobierno Municipal será quien brinde asistencia técnica y seguimiento a la producción de hortalizas.