Prevenir la violencia de género y cualquier discriminación en las escuelas del Cusco

La defensa de los derechos humanos y la prevención de cualquier tipo de discriminación por razón de sexo, raza o edad, entre otras categorías, es clave para crear una sociedad que acepte la diversidad como algo positivo. Nuestra fundación, a través de la ONG local Guaman Poma de Ayala, trabaja en las instituciones educativas de las comunidades del Valle Sur de Cusco (Perú) para prevenir la violencia y la discriminación.

Los derechos humanos son inalienables a todos los seres humanos, pero todavía existen profundas vulneraciones. En este sentido, tal y como argumenta la activista ecofeminista Yayo Herrero (2017), “cualquier propuesta que no sea universalizable no es válida porque es injusta. Cualquier cosa que no es universalizable no es un derecho, sino un privilegio”.

La ‘Declaración Universal de los Derechos Humanos’ establece como uno de sus principios transversales la ‘no discriminación’ por motivos de sexo, raza, color o etnia, entre otras categorías. Sin embargo, y en el caso de Perú, el 81% de la población de este país considera que la discriminación ocurre “todo el tiempo y nadie hace nada”. Por esta razón, para lograr un cambio social, es necesario impulsar el desarrollo de actividades socioeducativas y, a través de la ONG local Guaman Poma de Ayala, trabajamos para concienciar y sensibilizar a la población sobre las discriminaciones actuales que se producen de los derechos humanos, sobre todo contra las mujeres.

La vulneración contra los derechos de las niñas y mujeres “viola todos los principios de igualdad de derechos y del respeto de la dignidad humana; dificulta la participación de la mujer en las mismas condiciones que el hombre, en la vida política, social, económica y cultural de su país”, (ONU Mujeres, 2015). En el caso de Perú, según el Observatorio Nacional de la Violencia Contra las Mujeres y los Integrantes del Grupo Familiar, durante 2018 se han registrado un total de 150 casos de feminicidios y 133.697 mujeres han sido atendidas por violencia de género. En las zonas rurales la situación de las mujeres empeora todavía más debido a que por sus condiciones socioeconómicas sus derechos se vulneran de forma frecuente.

La alta prevalencia de situaciones discriminatorias en Perú, y concretamente en la región de Cusco, ha propiciado el desarrollo de intervenciones en las instituciones educativas de las comunidades indígenas del Valle Sur de Cusco. En el marco del proyecto “Promoción del acceso a un ambiente saludable y a los servicios de agua y saneamiento, en el marco de los derechos humanos y la equidad de género en las comunidades indígenas del Valle Sur de Cusco (Perú)”, financiado por la Diputación de Córdoba y gestionado por Fundación Social Universal, se están implementando talleres en las escuelas sobre la prevención de la violencia familiar y la discriminación por raza, sexo y edad.

A través de metodologías participativas con el alumnado, el personal de Guaman Poma de Ayala y las cooperantes del programa de la Universidad de Granada busca implicar al alumnado en los procesos de inclusión de niñas y niños que puedan sufrir cualquier tipo de discriminación generando procesos de empatía; así como analizar la violencia como desigualdad de género y en el ámbito familiar.

Las niñas y niños testigos de discriminación o violencia serán víctimas de un sistema basado en relaciones desiguales de poder. Entre todas y todos debemos ser capaces de construir una sociedad que acepte la diversidad como algo positivo y la defensa de los derechos humanos.