Entrega de obras a 13 familias campesinas de la comunidad de Huarcay
Con financiación de la AACID, el pasado 12 de diciembre se hizo entrega de las obras de mejora en viviendas e infraestructuras productivas a 13 familias indígenas de la comunidad campesina peruana de Huarcay.
4 familias accedieron a nuevos servicios higiénicos, 3 al mejoramiento de sus cocinas y 2 al mejoramiento de sus dormitorios y 4 a la construcción de galpones de cuyes e invernaderos para el cultivo de hortalizas. En total 65 personas han visto mejorada sustancialmente su calidad de vida con el acceso a una vivienda más digna y a infraestructura para la producción de alimentos. Entre ellas, Rosa Caballero Condori, beneficiaria de la mejora de confort térmico en su dormitorio, que manifestaba sentiré muy tranquila y contenta pues “estas cosas antes nunca las habíamos visto, antes nuestras casas eran solo de paja, ahora con estas mejoras nuestros hijos viven felices y duermen tranquilos en casas calientes”.
Como parte de una labor de incidencia, la comunidad convocó a la autoridad, funcionariado y personal municipal a la entrega de obras, convirtiéndose en un espacio de dialogo y sobre todo de sensibilización, donde participó toda la población y las dirigencias comunales, quienes dieron a conocer a los responsables políticos y técnicos el proceso de mejora de sus condiciones de habitabilidad, solicitando que se continúen con este tipo de intervenciones y las repliquen en otros ámbitos similares, para que más familias accedan a una vivienda digna y a infraestructura productiva para la mejora de la calidad de vida de las familias vulnerables del distrito de Lucre.
La transferencia de estas obras ejecutadas por la ONG peruana Centro Guaman Poma de Ayala suponen la culminación de un proceso de casi dos años de trabajo continuo con la población de esa comunidad altoandina ubicada a más de 3700 msnm, y contribuye al cierre de brechas socioeconómicas entre la población urbana y rural.
La pertinencia de esta intervención que benefició a las familias más vulnerables de la comunidad, ha motivado a otras familias a replicar en sus viviendas las mejoras realizadas en el marco de un proceso de capacitación continua y acompañamiento en el que participó toda la población contribuyendo a la mejora de las condiciones de habitabilidad y salubridad de las viviendas, así como la mejora de las condiciones de acceso y disponibilidad de alimentos.