En defensa de la política de cooperación internacional para el desarrollo en los presupuestos de la Junta de Andalucía para 2022
La FSU respalda la campaña de incidencia promovida desde la Coordinadora Andaluza de ONGD para la defensa de la política de cooperación internacional al desarrollo en los presupuestos de la Junta de Andalucía para el ejercicio 2022.
Después de tres años de retroceso de la política de cooperación internacional, todo apunta a que el Gobierno Andaluz volverá a recortar la Ayuda Oficial al Desarrollo en los presupuestos de la comunidad autónoma para 2022. De ser un referente a nivel nacional e internacional, Andalucía pasará a considerar la solidaridad internacional como una actividad residual. Es un menosprecio a la experiencia y los buenos resultados de los agentes de la cooperación en Andalucía y, sobre todo, a la defensa de los derechos humanos vulnerados de la población de los países del Sur.
Desde la Coordinadora Andaluza de ONGD nos estamos movilizando para exigir al Gobierno Andaluz que cumpla el mandato del Estatuto de Autonomía y los compromisos del actual Plan Andaluz de Cooperación para el Desarrollo, en el año de mayor crecimiento de las cuentas públicas y en un contexto de crisis global como el actual. Están en juego los derechos humanos de millones de personas en todo el mundo. Está en juego la definición de la Andalucía que queremos ser.
Invitamos a entidades y plataformas sociales andaluzas a suscribir el siguiente manifiesto en el siguiente enlace: https://docs.google.com/forms/d/1lkRk-khEv7WbBdqZ5N6smTn96GGovhyVQJnqF-ZBWV0/viewform?edit_requested=true
La cooperación andaluza consigue mejorar la vida de millones de personas en todo el mundo, en especial la de las que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Los agentes de la cooperación andaluza sumamos décadas de experiencia, de aprendizaje mutuo y acompañamiento a la población de los países del Sur en la lucha contra la desigualdad social. Esta trayectoria nos convertía en una comunidad autónoma referente en cooperación para el desarrollo no solo en España, sino a nivel internacional, ejemplo de solidaridad y de buen hacer. Así se recoge en la última campaña de la CAONGD, #MeQuitoElSombrero por la cooperación andaluza.
Si bien gobiernos anteriores no cumplieron con la progresión establecida para alcanzar el 0,7% destinado a Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) en la comunidad autónoma, ha sido en esta legislatura cuando el ejecutivo de PP y Ciudadanos está provocando un efecto devastador sobre esta política. En apenas dos años la AOD se redujo a la mitad (del 0,14 en 2018 al 0,07% de 2020). Incluso en los peores momentos de la pandemia, cuando los retos de la crisis hacían más necesarias las políticas globales, el Gobierno Andaluz recortó fondos extra a su política de cooperación internacional.
En un escenario de crecimiento de los presupuestos públicos (gracias, principalmente, a la inyección de fondos europeos para la reconstrucción) y con muchos países en clara situación de desventaja frente a los efectos económicos y sociales de la pandemia, lo razonable sería que creciera la apuesta por la cooperación internacional. Así lo ha entendido, por ejemplo, el Gobierno de España, que prevé incrementar su partida de AOD del 0,22% al 0,28% en 2022. Así lo han hecho también otras comunidades autónomas ya en 2021, como Euskadi, Navarra o La Rioja, todas por encima del 0,24%.
Tras las reuniones mantenidas con responsables de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación (como la viceconsejera o la directora de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo), desde la CAONGD observamos con preocupación la falta de información sobre el presupuesto que destinará la Junta de Andalucía a AOD en 2022.
Los continuos recortes en la Ayuda Oficial al Desarrollo desde el año 2018 han tenido como consecuencia directa que el número de personas destinatarias de las intervenciones de las ONGD andaluzas se haya reducido hasta representar en la actualidad solo una tercera parte (de 17’5 a 5’5 millones) respecto a las de 2017. También ha afectado a las propias personas trabajadoras de estas ONGD, que han pasado de ser 1.851 en 2018 a 1.180 en 2020; una reducción de más de un tercio de sus plantillas que tiene consecuencias tanto en el alcance de los proyectos que desarrollan como en la carga de trabajo que tienen que asumir sus profesionales.
Más allá de las cuestiones humanitarias, del masivo apoyo ciudadano a las políticas de cooperación internacional o del carácter solidario del Pueblo Andaluz, los continuos recortes a la AOD no son coherentes con el Estatuto de Autonomía, que establece que “la cooperación internacional con el objetivo de contribuir al desarrollo solidario de los pueblos” es un objetivo básico de la Comunidad Autónoma. El Gobierno Andaluz incumple también su propio Plan Andaluz de Cooperación para el Desarrollo (PACODE 2020-2023), que especifica que “el objetivo es que el presupuesto aumente al menos proporcionalmente a lo que lo haga el presupuesto de la Junta de Andalucía”. En 2022 será el más alto de la historia, con más de 43.800 millones de euros.
La CAONGD y las organizaciones sociales abajo firmantes exigimos al Gobierno Andaluz que la Ley del Presupuesto de la Comunidad Autónoma de Andalucía para el año 2022 recoja un incremento de la financiación pública a la AOD que sea, al menos, proporcional al incremento presupuestario para el conjunto de las cuentas públicas.
Están en juego los derechos humanos de millones de personas en todo el mundo. Está en juego la definición de la Andalucía que queremos ser.