El IPBS apoya el desarrollo socioeducativo y el bienestar de la infancia y adolescencia vulnerable

Bajo el título “Conectad@s al bienestar”, el Instituto Provincial de Bienestar Social de la Diputación de Córdoba ha comprometido para este año su colaboración económica con los proyectos de la FSU de apoyo socioeducativo para prevenir conductas de riesgo y facilitar la inclusión de la infancia y adolescencia más vulnerable.

Más de 60 menores en situación de vulnerabilidad con edades comprendidas entre los 2 y 17 años, principalmente de la localidad de Montilla, son los destinatarios de este proyecto iniciado en el mes de abril con fecha de finalización prevista para el 31 de diciembre de este año.

Según el último informe de la Dirección de Estadísticas y Censos de Córdoba, la pobreza llegó en 2021 al 46% de la población en la provincia. La pobreza infantil ha escalado puestos en la provincia de Córdoba desde mayo de 2019 a la actualidad. Si en el primer semestre del pasado año estaban en riesgo de pobreza el 41% de los menores -de 0 a 16 años- de la provincia cordobesa, los últimos datos muestran que ese índice se ha elevado al 43,1%, situándose como la provincia con mayor porcentaje de niños en riesgo de pobreza de toda Andalucía. Así lo muestra el último informe de la consultora Ais Group sobre pobreza infantil, publicado por este medio. Este estudio ha sido elaborado en base a los indicadores Habits Big Data que permiten conocer la presencia y perfil de gasto de cada tipología de hogar en cada zona, en base a cifras del último umbral de pobreza publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Bajo la premisa de que las situaciones de pobreza infantil son el germen del abandono y/o fracaso escolar, del consumo de sustancias tóxicas, de la adicción a las nuevas tecnologías y redes sociales, de las relaciones tóxicas y violentas, incluso en las chicas, de embarazos tempranos no deseados, desde los proyectos de la Fundación Social Universal intervenimos desde hace 12 años con menores en situación de vulnerabilidad en diferentes ámbitos, encaminados a paliar los impactos negativos de esta situación y buscando la mejora de la calidad de vida de la infancia y adolescencia, favoreciendo su protección, su desarrollo, su bienestar, salvaguardando sus derechos.

Con la presente intervención se pretende prevenir conductas de riesgo y facilitar la inclusión de la infancia y adolescencia más vulnerable, generando hábitos que favorezcan el bienestar, la salud emocional y física, las relaciones sociales constructivas e igualitarias, así como la consecución de sus metas académicas.

Para la consecución de este propósito, Conectad@s al bienestar incidirá en la prevención del absentismo y en facilitar la adaptación y mejora del rendimiento escolar de las niñas y niños y adolescentes; el desarrollo de habilidades personales para que se acepten y se quieran a sí mismos, así como para mantener relaciones sociales basadas en el respeto y la empatía; el conocimiento de los riesgos del espacio virtual que representa internet y utilicen este medio con autonomía, responsabilidad, protegiéndose y protegiendo a los demás. Asimismo, el proyecto promoverá la generación de estilos de vida saludables que prevengan cualquier tipo de adicción en los menores de edad, y en orientar y acompañar a adolescentes con edades comprendidas entre los 15 y 17 años en sus proyectos formativos.

Las actuaciones, tanto individuales como en talleres grupales, de acompañamiento escolar, asesoramiento joven en educación socioemocional, sexualidad y relaciones igualitarias, uso positivo de las tics, estilos de vida saludables y acompañamiento a la formación, entre otras, se desarrollan en coordinación con los centros educativos y el Ayuntamiento de Montilla en la Casa Joven y el Hogar de Tardes Mamá Margarita de la Fundación Social Universal de Montilla.

Esta propuesta presenta dos elementos innovadores. Por un lado, la implicación activa de los propios menores participantes en la solución del problema, empoderándolos y dotándolos de herramientas que facilite el cambio den sus vidas. Por otra parte, la coordinación de varios agentes sociales como el ayuntamiento, los centros educativos, las asociaciones juveniles y el voluntariado social para ser más eficaces y efectivos en la consecución de los cambios sociales.