¿Conoces el mito griego de Perséfone?

Os lo cuento en pocas líneas. Perséfone era la hija de Zeus y Deméter, la diosa griega de la agricultura y la fertilidad de las tierras. En el mito, Perséfone es raptada por Hades, que la lleva consigo al inframundo. Cuando Deméter tiene noticia del rapto de su hija, comienza una serie de viajes con la intención de encontrarla y traerla de vuelta a casa. Dado que Deméter era la encargada de dar fertilidad a la tierra, cada vez que salía en busca de su hija la tierra se quedaba desprovista de fertilidad y los campos yermos.

Imaginaos lo insostenible de la situación para una sociedad antigua como la griega. Es por eso que Zeus decide intervenir y todos llegan a un acuerdo: Perséfone pasará una parte del año con su madre en el Olimpo y la otra, en el inframundo con Hades. La parte del año en la que Perséfone está en el inframundo su madre está triste y es por eso que la tierra se vuelve yerma y los cultivos no prevalecen, estamos en invierno. Fue la forma en la que la mitología griega explicaba el paso de las estaciones.

A esta altura os estaréis preguntando qué tiene que ver todo esto con el huerto y por qué os lo cuento ahora. Os lo cuento porque, como bien notaron los griegos, hay un período del año en el que la mayoría de las plantas del huerto parece que se quedan dormidas. Por mucho que las reguemos, abonemos o cuidemos no crecen. Como podéis imaginar, esto no tiene que ver con la tristeza que sufre Deméter mientras dura la estancia de Perséfone en el inframundo, si no con otros motivos.

Lo que explica el parón de las plantas es la duración del día. Ya sabéis que la luz solar es tremendamente importante para ellas. La usan para producir su propio alimento, para aproximar la fecha de floración y para muchos otros procesos fisiológicos. Pues bien, la mayoría de las especies del huerto entra en parada cuando entre el amanecer y el anochecer hay menos de 10 horas. Son esos días, a los que llamamos días de Perséfone en recuerdo del mito.

El primer y último día de Perséfone varía en función de la latitud de cada lugar. En Montilla, tenemos unos 2 meses de Perséfone, desde el 21 de noviembre hasta el 21 de enero aproximadamente. ¿Y qué fecha es hoy? 24 de enero, así que acabamos de salir de los días de Perséfone. A partir de ahora las plantas que tengáis en el huerto empezarán a despabilarse poco a poco. Esperemos que las temperaturas y las lluvias acompañen.

Y, ¿cuál es la parte práctica de todo esto? Pues que si tenemos intención de sembrar o trasplantar algo en Noviembre mejor hacerlo antes de entrar en los días de Perséfone y si no tenemos ocasión, dejarlo para cuando acaben. De lo contrario tendremos una planta en el huerto que va a crecer poco o nada y sin embargo, estará expuesta a peligros como inclemencias del tiempo, ataque de pájaros o plagas. Igualmente si habéis plantado algo en días que eran de Perséfone y las plantas no han tirado, no os preocupéis, es normal. Seguro que a partir de ahora empiezan a crecer sin problemas.
Nos vemos por La Toba.

Juan Manuel Cívico Crego

Huertos Ecológicos Familiares de La Toba