Anta y la salud mental: un desafío en tiempos de COVID 19
La municipalidad de Anta aprobó una ordenanza municipal para promocionar y proteger la salud mental de los 9 distritos de la provincia, especialmente en respuesta a la situación de pandemia y post hacinamiento.
La problemática de salud mental en el país ha enfrentado un espacio diferenciado a las demás políticas sociales de salud del gobierno durante los últimos años. Desde la invisibilización del problema hasta una limitada falta de recursos e infraestructura para combatirlo, dirigen este hacia un escenario muy precario dentro del país que cada vez presenta una mayor demanda de pacientes y guarda el desafío de una concentrada centralización de su atención en la capital del país. Ante ello, resulta necesario brindarle un espacio y atención desde instancias más descentralizadas y subnacionales de gobierno a efectos de combatir esta problemática.
En la reunión del pasado 27 de junio del Comité Provincial de Seguridad Ciudadana (COPROSEC) de Anta, en Cusco, y liderado por el alcalde provincial con la participación de la Policía Nacional del Perú, Salud, Educación, Sub prefectura, Poder Judicial, Ministerio Público, Centro de Salud Mental y organizaciones de la sociedad civil, se aprobó la ordenanza municipal con la iniciativa de política pública de salud mental para la provincia con sus 9 distritos.
Este esfuerzo incorpora acciones de protección y promoción en el nivel personal, familiar y comunitario en bienestar psicosocial y/o prevención o trata de afecciones de la salud mental. Con esta propuesta legislativa se busca sentar una respuesta en Anta al incremento de situaciones emocionales desencadenantes de temor o incertidumbre producto de la pandemia y el post-hacinamiento. Además de ello, se involucró a pacientes con acumulado estrés por el contagio y población con procesos de duelo y afectación a causa de la mortalidad de este peligroso virus.
Para efectos de este documento, se utilizó el Plan de Salud Mental en contexto de pandemia del Ministerio de Salud, el último reporte de la Defensoría del Pueblo respecto al Centro de Salud Mental Comunitaria de Anta y la experiencia de políticas públicas de salud mental del país colombiano. Esta suma de insumos configuró esta política pública para el distrito de Anta que se pondrá a disposición a partir de del mes de julio.
La salud mental no es ningún juego y, en etapas de gran incertidumbre de diversos ámbitos, adquiere una relevancia prioritaria respecto a su atención y desapegada de estigmas que giran en torno a la problemática. Se espera que próximamente acciones como el de esta ordenanza tengan efectos en otros distritos cusqueños priorizando inicialmente aquellos que cuenten con la infraestructura de un Centro de Salud Mental Comunitario.
Esta acción fue posible a la implementación del proyecto “Sociedad civil organizada y gobiernos locales con mejores habilidades de resiliencia y capacidad para promover la participación ciudadana en la prestación de servicios públicos en el proceso de recuperación social y económica frente a la crisis de la pandemia por la COVID 19 en la provincia de Anta – Cusco (Perú”) que financia el Ayuntamiento de Córdoba a través de la Fundación Social Universal.