La Diputación de Córdoba nos presta su apoyo para la eliminación de brechas de género en niñas y adultas en situación de vulnerabilidad de Montilla

Gracias a la subvención recibida desde la Delegación de Igualdad de la Diputación Provincial de Córdoba, la Fundación Social Universal pone en marcha desde la Casa Joven y el Hogar de Tardes Mamá Margarita actividades con infancia, juventud y mujeres adultas para educar, empoderar y eliminar brechas de género y construir espacios sanadores y reparadores con la implicación de diversos agentes sociales de la localidad.

En estos tiempos de pandemia los índices de pobreza, de exclusión, de discriminación, la brecha social se ceba de manera exponencial con los grupos más vulnerables, de manera particular con las niñas y las mujeres.

La carga social, familiar y laboral aplasta a estas mujeres, sobre ellas recae la responsabilidad de que sus hijas e hijos sigan las clases escolares virtuales y aprendan (por consiguiente de que haya internet, ordenador, de saber utilizar las plataformas digitales, de saber algo de Lengua, Matemáticas, Inglés, Francés, … y de dedicar tiempo para ayudar a sus hijas e hijos), de que sus casas estén limpias y ordenadas, de la alimentación de la familia y demás necesidades básicas como la salud, proporcionar espacios de ocio y diversión, de actividad al aire libre, de que haya luz y agua caliente; pero también de llevar dinero a casa para poder hacer todo esto. Recae sobre ellas el que sus hijas e hijos “estén bien”, de que sientan seguridad, protección, cuidado, cariño. A veces cuentan con una pareja, pero en otros casos están solas, sin red social que las apoye, o con parejas que las someten a un mal trato continuo.

¿Y qué están viviendo las niñas? Ellas, que se sienten identificadas con sus madres, reciben parte de esta carga. Cuando la madre debe salir a trabajar al campo, cuidando personas mayores, limpiando casas u oficinas, a buscar trabajo… las niñas asumen su rol, cuidan de sus hermanos y hermanas, y les ayudan con las tareas escolares, limpian la casa, preparan la comida y luego, si les queda tiempo y ganas, estudian y hacen sus trabajos de clase. A esto unimos la preocupación que sienten viendo a sus madres y padres preocupados, sabiendo que el dinero no llega para lo necesario, escuchando discusiones en casa, viviendo hacinadas, sin un espacio propio, sin intimidad, con sus relaciones sociales coartadas.

Estas vivencias están generando en mujeres y niñas una heridas emocionales y sociales que debemos sanar. Desde la Fundación Social Universal hemos puesto en marcha una intervención a nivel individual, grupal y comunitario porque toda la ciudadanía somos corresponsables en la salvaguarda de los derechos de las niñas y las mujeres, a través de actividades como “Café de mujeres importantes”, “Pedagogía de emergencia para sanar heridas emocionales en las niñas y adultas en situación de vulnerabilidad causadas con la Covid 19”, “Taller de igualdad de género en adolescentes”, “ Alfabetización digital de niñas y adultas en situación de vulnerabilidad” porque con el apoyo de todos y todas avanzamos en este fin de justicia y equidad.