Conociendo a los Premios FSU 2019
Juan Romero, Premio a la Defensa del Medio Ambiente
Como Premio a la Defensa del Medio Ambiente, la Fundación Social Universal destaca la labor de Juan Romero Romero, activista incansable en la lucha por la protección y conservación de la Naturaleza, “por su destacado compromiso en la defensa de los espacios protegidos, especialmente en Doñana, y por haber sembrado en la juventud el mejor legado para la conservación de nuestra biodiversidad y de un futuro sostenible”.
Natural de Berrocal (Huelva), maestro de primaria y músico, persona de talante dialogante y mediador, ha protagonizado algunos de los momentos claves en la defensa del Parque Natural de Doñana. Haber nacido en un pueblo que era prácticamente autosuficiente y aislado de otras poblaciones, donde toda la gente trabajaba de sol a sol, le ha mantenido en contacto con la Naturaleza como gran aliada, y le ha hecho conocer la dureza de la vida rural, una forma de vida que hoy día se le antoja la más sana, sostenible y enriquecedora.
Su implicación en la defensa del medio ambiente nace en los años 80, cuando el movimiento ecologista se iba fraguando en Huelva. En 1984, conjuntamente con miembros de la Coordinadora Ecologista de Huelva, que formaba parte de la Confederación Ecologista Pacifista de Andalucía (CEPA), se encadenó en las puertas de Medio Ambiente. También participó activamente en 1988 en las movilizaciones contra la construcción de Costa Doñana, un proyecto de urbanización de 6 kilómetros con 32.000 plazas hoteleras y campo de golf en la duna fósil de El Asperillo (Doñana) que lograron tumbar.
En enero de 1995 fue nombrado representante de las asociaciones conservacionistas andaluzas en el Patronato de Doñana, que luego pasó a ser Consejo de Participación del espacio natural protegido, donde ha vivido grandes alegrías y grandes sinsabores medioambientales. Recién consolidada la Confederación de Ecologistas en Acción, Juan Romero anunció y denunció en el Órgano colegiado lo que se convertiría en la mayor catástrofe ambiental ocurrida en Andalucía en abril 1998: la rotura de la presa de la balsa de decantación de la mina de Aznalcóllar, propiedad de Boliden, vertiendo 6.000.000 metros cúbicos de lodos tóxicos sobre las riberas de los ríos Agrio y Guadiamar, que afectaron a 4.634 hectáreas en el entorno del parque de Doñana.
Los representantes ecologistas han trabajado unidos en el Consejo de Doñana, obteniendo con esta colaboración varios logros. En 2008 se paró el oleoducto proyectado con la refinería Balboa en Los Santos de Maimona (Badajoz), que iba a recorrer unos 200 kilómetros pasando por el entorno Doñana y nueve espacios naturales protegidos, desembocando en el puerto de Huelva. Ese mismo año, el Grupo ENCE proyectaba sembrar 5.000 nuevas hectáreas de eucaliptos en la finca Cerrado Garrido ubicada en las marismas, a escasos 100 metros del Parque Nacional, pero se logró el cese de las siembras y se pidió el blindaje del espacio natural y su zona de influencia contra estos cultivos. En octubre de 2009, el Puerto de Sevilla presentó un proyecto de dragado de profundización del Río Guadalquivir consistente en aumentar el calado del río en dos metros de profundidad de media en el canal de navegación, que finalmente se logró paralizar y actualmente está oficialmente cancelado. En 2006 Ecologistas en Acción logró una sentencia condenatoria que supuso un punto de inflexión en la impunidad de los abusos agrícolas. En 2009 llegaron varias denuncias a la Comisión Europea por la situación de sobreexplotación del acuífero y el deterioro de los ecosistemas de Doñana, entre ellas la de Ecologistas en Acción. Pero no ha sido hasta este año 2019 que la Comisión Europea ha adoptado la decisión de llevar a España ante el Tribunal de Justicia Europea por su inacción para proteger este espacio protegido, cuando las cosas están empezando a cambiar y dejando de quedar impunes los delitos, habiendo sido declarado el acuífero como sobreexplotado por el gobierno.
Juan Romero ha trabajado a lo largo de todo este tiempo de Ecologistas en Acción como tal en materia de eliminación de cultivos de eucalipto en la provincia de Huelva, en la lucha contra el vertedero de residuos tóxicos de Nerva; en materia de contaminación por vertidos; de pérdida de suelo forestal convertido a agrícola de regadío; en la permeabilización de infraestructuras para la fauna, en particular del lince ibérico; en contra del furtivismo y las artes ilegales de caza, la promoción de medidas que favorezcan el anidamiento de aves, en especial en zonas urbanas; y tantos otros casos de perjuicio, alteración o destrucción de recursos naturales.
Desde 2016, como miembro de Ecologistas en Acción, ha participado activamente en la resurgida plataforma Salvemos Doñana contra la creación de un almacenamiento de gas natural bajo el acuífero de Doñana proyectado por Naturgy (Gas Natural Fenosa), que hoy parece que se ha logrado que tenga que ser desmatelado, cancelado y archivado.
Hoy, a punto de jubilarse, sigue en la lucha contra las plantaciones de eucalipto y en favor del monte mediterráneo, sigue en la lucha contra el vertedero tóxico de Nerva, sigue en la lucha contra los atropellos y disparos a linces en Doñana… sigue trabajando en defensa de los recursos naturales de la provincia de Huelva. Y continuará activo en las lides ecologistas porque no ha perdido la fe en el ser humano.